Este ritual consiste en enfrascar tu energía personal dentro de un pequeño recipiente sagrado, donde queda protegida y resguardada de influencias externas. Su propósito es crear un escudo invisible alrededor de ti, evitando que influencias externas, malas intenciones o trabajos de brujería logren afectarte.
Con el tiempo, y especialmente en momentos de cansancio, debilidad o bloqueo, el ritual puede ser reforzado y renovado, reactivando la protección y devolviéndote equilibrio, claridad y bienestar. Así, el tarro no solo guarda tu energía: la protege, la regenera y la potencia.
Un aliado espiritual para mantener tu luz firme, incluso en los días más difíciles.
Este ritual consiste en enfrascar tu energía personal dentro de un pequeño recipiente sagrado, donde queda protegida y resguardada de influencias externas. Su propósito es crear un escudo invisible alrededor de ti, evitando que influencias externas, malas intenciones o trabajos de brujería logren afectarte.
Con el tiempo, y especialmente en momentos de cansancio, debilidad o bloqueo, el ritual puede ser reforzado y renovado, reactivando la protección y devolviéndote equilibrio, claridad y bienestar. Así, el tarro no solo guarda tu energía: la protege, la regenera y la potencia.
Un aliado espiritual para mantener tu luz firme, incluso en los días más difíciles.
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